lunes, 25 de octubre de 2010

Finalizan los trabajos de arqueología en la necrópolis romana aparecida en calle La Unión durante las obras del metro.





Aparecen restos de una necrópolis romana del alto imperio en las obras del metro de Málaga a su paso por calle La Unión en la Cruz de Humilladero. Arqueólogos de la Delegación de Cultura de la Junta de Andalucía han determinado que la necrópolis estaría ligada a una de las vías de salida de la ciudad romana. Metro Málaga ha declarado que al encontrarse los restos en deficiente estado de conservación no permanecerán en el lugar en el que han aparecido y que las obras no se paralizarán. Sin embargo a primera vista, como se aprecia en las fotos tomadas en la mañana del 22 de octubre de 2010, algunos esqueletos han aparecido intactos y en muy buen estado de conservación.


Que haya aparecido una necrópolis romana tan alejada del centro nos da una nueva dimensión de la casco histórico malagueño.

En Granada también han aparecido restos arqueológicos pero la ciudad vecina ha tenido más suerte.

El Metropolitano de Granada y la Delegación Provincial de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía han definido la integración y tratamiento de los restos arqueológicos hallados en las obras de excavación del vestíbulo de la estación Genil, denominada ahora Alcázar Genil por los vestigios descubiertos. Una medida que pasa por la construcción, en un nivel superior al vestíbulo de la estación subterránea, de un centro de interpretación que permitirá a las personas usuarias conocer los restos de esta edificación anexa al Alcázar del Genil y que, durante el periodo almohade, era un espacio reservado para la celebración de naumaquias –batallas navales a escala real-.



La construcción de este espacio se ha decidido en consenso con el equipo de arqueólogos de la Delegación Provincial de Cultura que, desde el momento del hallazgo, han trabajado en plena coordinación con los técnicos del metro ligero.



Los delegados provinciales de Obras Públicas y Vivienda y de Cultura, Nieves Masegosa y Pedro Benzal, respectivamente, visitaron hoy la estación para exponer, junto al director del Metropolitano de Granada, Francisco Ruíz Dávila, los principales elemento del tratamiento e integración de los restos arqueológicos que se van a adoptar.



El futuro centro de interpretación del Alcázar del Genil, integrado en la estación, tendrá unas dimensiones de 400 metros cuadrados, aproximadamente, y se situará a 1’8 metros del vestíbulo de la estación, en un nivel superior. Los accesos contarán con rampas para garantizar, en todo momento, el acceso para personas con movilidad reducida. Su estructura se ha diseñado preservando la funcionalidad de la estación, en cuanto al tránsito de los usuarios, así como la accesibilidad al andén central (donde se accede al tren). Para ello, será necesario cambiar de ubicación el ascensor de bajada, aunque el andén se mantendrá inalterable. Es decir, éste será andén central y a ambos lados tendrá cada una de las plataformas de vía del metro.



Asimismo, será necesario reforzar la losa estructural existente (losa de cubierta o techo de la estación) para suprimir uno de los pilares que sustenta la referida losa de cubierta, de cara a la integración del referido centro de interpretación.



Esta actuación no supondrá una modificación de los plazos globales de la finalización de las obras del Metropolitano de Granada y su presupuesto final se está perfilando en la actualidad, una vez determinado el procedimiento a seguir.



Los restos de la naumaquia del Alcázar del Genil se hallaron el pasado verano e, inmediatamente, se activó el protocolo de actuación y coordinación que existe entre el Metropolitano de Granada y la Delegación Provincial de Cultura de la Junta de Andalucía. Este protocolo ya se puso en marcha con el hallazgo de tumbas de la época tardorromana en el Campus Universitario de Fuentenueva. Hasta la fecha, un equipo de arqueólogos ha trabajado en la investigación y las excavaciones que se han extendido a las estructuras anexas a la naumaquia –muros y acequias-.



Estas actuaciones se han complementado con un seguimiento topográfico –para garantizar la estabilidad de los muros- y con la restauración de dichos vestigios. Respecto a la conservación, estas labores implican la instalación de vigas metálicas aligeradas que apuntalan los muros de la naumaquia, desde abajo. Así, se garantiza una estabilidad para ejecutar el suelo de hormigón entre ambos muros (que permitirá el recorrido por el centro de interpretación) e integrar la estructura en los muros de la estación.



El hallazgo de estos restos arqueológicos se ha producido en el tramo Río Genil-Parque Tecnológico del Metropolitano de Granada, infraestructura que ejecuta la Junta de Andalucía. Un tramo de una longitud de 3’4 kilómetros, de los cuales el primer kilómetro discurre de forma subterránea (estación Alcázar Genil), coincidiendo con el paso bajo el Camino de Ronda, y el resto en superficie, entre la zona de la antigua Hípica y el Parque Tecnológico.

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Los restos arqueológicos de Málaga deberían ser convenientemente estudiados y tener un tratamiento expositivo similar a los de Granada dando así una nueva dimensión histórica y patrimonial a barrio de la Cruz de Humilladero.

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